PROPÓSITOS PARA ESTE AÑO QUE COMIENZA

Llama la atención que casi todos al principio de año, con la mejor voluntad, hacemos propósitos para cambiar nuestros malos hábitos. Acabo de leer los que anoté el año pasado y solo pude cumplir un par de ellos… y a medias. Una amiga ya mayor me dijo algo que me impresionó: cuando le dije “siempre he querido lograr tal cosa”, ella me preguntó “¿cuántos años tienes?” y después añadió: “Pues ¿qué esperas? hazlo antes de que tu tiempo se acabe”.

Una encuesta social indica que sólo el 9.2% de las personas que hacen propósitos, al principio de año, los cumplen[1] y pienso en el viejo refrán que dice: “De buenos deseos apretaditos están los infiernos”. Sin embargo, hay que reconocer que el entusiasmo por mejorar nuestros hábitos no siempre va de la mano con la disciplina. Esto refleja un problema humano que afecta a la mayoría, aun a los más disciplinados y convencidos de cumplirlos.

No hay que confundir las metas que tenemos y nos hemos propuesto alcanzar en la vida (proyecto personal), con los propósitos de cambiar hábitos que nos perjudican. Los propósitos más comunes son:

• Hacer ejercicio a diario y perder peso.

• No perder más tiempo, fuera de mi trabajo, con los medios de comunicación y redes sociales (celular, Whatsapp, Facebook, televisión, etc.).

• Ser más paciente y cooperar con mi familia; darles tiempo de calidad a mis seres queridos.

• No juzgar con dureza a cada persona que no piensa como yo, ni a mí misma.

• Hacer las paces con mi hermana o alguien de mi familia que me haya ofendido.

• Hacer oración y aprender a meditar.

• Hacer un servicio social voluntario o comprometerme más en mi apostolado.

• Ser puntual y comprometida.

• Leer buenos libros.

• Tener orden en mis cosas y documentos.

Hay variedad de propósitos de principio de año, así como somos muy diversos entre nosotros y marcados por la cultura, la edad, el sexo, etc.

Los principales obstáculos para cumplir los propósitos son:

1. Seleccionar muchos propósitos sin reflexionar si realmente los queremos cumplir.

2. Propósitos poco realistas sin tomar en cuenta nuestra edad, cultura, posibilidades económicas o la fe que profesamos.

3. Urgencia de dar seguimiento y tener un sistema para cumplirlos.

Cuando en pedagogía trabajamos en Desarrollo Humano, para lograr cambios en los alumnos y alumnas se les pide UN SOLO CAMBIO A LA VEZ y LA REVISIÓN de ese cambio. En los talleres que trabajamos en esta revista usamos el método de VER, VALORAR Y ACTUAR y en nuestro trabajo apostólico también. Cuando hablamos del compromiso pedimos acciones concretas y evaluables y no grandes acciones que no se pueden revisar.

CÓMO LOGRAR CUMPLIR CON LOS PROPÓSITOS DEL AÑO QUE COMIENZA

Haz lo siguiente después de hacer tu lista:

1. Selecciona el propósito que realmente te gustaría lograr. Uno solo y escríbelo para tenerlo a la vista, cerca de tu cama, en tu escritorio, en la cocina, etc. Por ejemplo, caminar o hacer ejercicio, durante veinte minutos tres veces a la semana.

2. Crea un plan para lograrlo. Una acción fácil de realizar diario. Por ejemplo, Haré el ejercicio lunes, miércoles y viernes. Cuidar la salud es una obligación.

3. Empieza hoy mismo y se perseverante. Por ejemplo, “En esta semana empezaré y me acordaré de que soy responsable de mi salud porque si yo estoy bien, mi familia, mi comunidad me lo agradecerán”.

4. Marca en un calendario los días que cumpliste con tu propósito. Evalúa si lograste alcanzarlo y en cuánto tiempo.

Te puedo asegurar que, si repetimos una acción conscientemente por 21 días, 3 semanas, tal acción se convierte en hábito.

Si escogemos un solo propósito es más fácil darle seguimiento. Aunque volvamos a caer, por lo menos estaremos más conscientes del hábito que necesitamos. Quizá al finalizar el año 2019 hayamos cumplido por lo menos 3 propósitos, en lugar de ninguno.

Antes que nada, hay que confiar en la acción de Dios y conviene fundar nuestros propósitos en motivaciones reales que nos ayuden a superarnos, día a día.

PARA REFLEXIONAR:

• Escribe sólo tres propósitos para este año.

• Selecciona para comenzar, sólo uno de ellos.

• Comparte tus propósitos con tu familia o con una amiga.

Pedagoga y Expresidenta General de la Unión Mundial de las Organizaciones Femeninas Católicas (UMOFC)

mariaeu.diaz@gmail.com

[1] Según Statistic Brain, para final de año solo el 9.2% de las personas sienten que han cumplido los propósitos que se habían propuesto al inicio de año. Cfr. Sofía Macías en Periódico “El país”, 1 de febrero de 2018, México. Se puede consultar el artículo completo en la página web del diario El País (https://elpais.com/)