¡Ándale Juana, no te dilates con la canasta ...!

… ¡De los cacahuates, de las nueces, de las almendras, de las avellanas y de los pistaches! Las nueces, tan ricas en todos sus tipos, son un ingrediente esencial en la repostería y chocolatería; se pueden comer solas, de botana, en ensaladas, en todo tipo de carnes, en cereales y, en esta época navideña, ¡son un alimento que no puede faltar!

Pero, ¿son buenas las nueces nutricional y médicamente hablando?

¡Claro que sí! Se ha visto en estudios de alto nivel científico que las nueces, en todos sus variedades, reducen el riesgo de enfermedades crónicas degenerativas como la diabetes mellitus, así como de enfermedades cardiovasculares, como infartos en corazón y cerebro o la presión alta. Incluso, su ingesta se ha asociado —en las personas que comen nueces los 7 días de la semana— con una disminución de hasta un 20% en la mortalidad por cualquier causa: cáncer, padecimientos del corazón y enfermedades respiratorias.

¿Qué tienen las nueces?

Las nueces son un alimento densamente nutritivo pues contienen ácidos grasos insaturados, vitaminas, minerales, fibra y muchas otras sustancias bioactivas, como antioxidantes fenólicos y fitoesteroles. Su consumo tiene efectos benéficos en la enfermedad coronaria y sus intermediarios, como el nivel de colesterol. Por esta razón, la Food and Drug Administration (FDA), de Estados Unidos, en 2003 concluyó que el consumo de 43 gramos al día de la mayoría de los tipos de nueces, aunado a una dieta baja en grasa, puede disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Entre los principales nutrientes de las nueces encontramos los siguientes:

GRASAS INSATURADAS que no son de origen animal y se consideran como grasas “buenas”.

PROTEÍNA DE ALTA CALIDAD que sirve para formar y reparar tejidos de la piel, órganos, músculos, uñas, pelo y huesos.

FIBRA que mejora la función intestinal.

VITAMINA E que es un antioxidante importante para el organismo.

FOLATO, cuya deficiencia está asociada con defectos del tubo neural en el embarazo, dando lugar a malformaciones en el bebé o riesgo de aborto espontáneo y anemia.

NIACINA, que mantiene la piel sana, mejora el sistema circulatorio y mantiene en buen estado el sistema nervioso. Es esencial en reacciones bioquímicas del metabolismo.

MINERALES, como potasio, magnesio y calcio, que el organismo aprovecha para muchas funciones distintas: la formación de huesos, la producción de hormonas y la regulación de los latidos cardíacos.

FITIQUÍMICOS, como carotenoides, flavonoides y fitoesteroles, que tienen un gran poder antioxidante y un posible papel en la prevención del cáncer.

Como podremos notar, todos estos nutrientes tienen propiedades cardioprotectoras, anticarcinogénicas, antiinflamatorias y antioxidantes.

Se ha observado en estudios que el consumo de nueces reduce el estrés oxidativo y la inflamación de las enfermedades crónicas, así como la adiposidad visceral, o sea, la obesidad abdominal; la resistencia a la insulina, la hiperglicemia o azúcar alta y la disfunción endotelial, es decir, el daño en las paredes de las arterias. También se ha visto en estudios prospectivos que el aumento en su ingesta, además de disminuir el riesgo de diabetes mellitus, reduce el riesgo de cáncer de colon, piedras en la vesícula, diverticulitis, hipertensión y muerte por enfermedades de tipo inflamatorio.

Existe la preocupación de que el consumo frecuente de nueces puede causar aumento de peso; sin embargo, en diversos estudios se ha avistado que la gente que consume nueces es más delgada, tiene menor circunferencia de cintura, menor propensión a ganar peso y menor riesgo de tener sobrepeso y obesidad. Claro está que ¡DEBES TENER CUIDADO CON LAS CANTIDADES QUE CONSUMES! Como cualquier alimento que te da nutrientes y energía, si te excedes en su consumo y no gastas toda la energía que ingieres al día, puedes aumentar de peso. Recuerda: hay que tratar de mantener un equilibrio entre lo que comes y lo que gastas. La ingesta de cualquier alimento debe estar acompañada de un estilo de vida saludable con buena alimentación y actividad física para poder mantener tu peso.

Se ha observado también que la Dieta Mediterránea, que incluye un consumo promedio de 30 gramos de nueces al día, tiene un efecto protector contra la enfermedad cardiovascular. Pero, abusada con las nueces saladas, pues aumenta tu consumo de sodio y ¡te invita a comer más de las necesarias! Elige las nueces, almendras o avellanas naturales sin aditivos.

¿Si incluyo nueces a mi alimentación actual, aunque no sea saludable, viviré más años? No podría contestar esa pregunta, pero indudablemente su consumo tiene efectos benéficos en la salud y comer nueces puede aumentar años de vida.

Así que no lo dudes más y ¡AGREGA LAS NUECES A TU ALIMENTACIÓN PARA TENER BUENA SALUD Y PONER TU GRANITO DE ARENA PARA PREVENIR ENFERMEDADES!. AF